Percibo una sublime luz que enciende y avivas otras luces.
Veo un noble Corazón, que abre más y más
corazones.
Contemplo innumerables manos que se unen,
alzan y celebran, escucho palabras de aliento, que movilizan el alma.
Siento como el amor crece y se agiganta.
Aunque no divise tu rostro, sé que eres
tu eterno amigo, que intensamente estas trabajando para cumplir con tu misión.
No detengas tu marcha .Viniste a
transformar la realidad.
Tenemos un acuerdo admítelo de ayudarnos
a recordar el sentido de este viaje.
Sin embargo estas palabras exceden
nuestro bello compromiso.
Te escribo porque me siento honrado de
presenciar cómo tu espíritu al igual que el de muchos otros, libera su encanto
para convertir la apatía y el desgano en campos de fe y esperanza.
Río por que la tristeza llora al verte
llegar, sabe que se queda sin trabajo.
Disfruto de tu manera simple y efectiva
de emitir vibraciones luminosas, que encandilan y extinguen la pesadez de las
sombras.
Sé que tu tarea es desgastante.
Comprendo que estas expuesto a la
violencia de quienes buscan marchitar todas las flores.
No te preocupes, el cultivo crece bajo la
custodia de los reinos cristalino.
Nada, ni nadie, impedirán el total
florecimiento de la luz. ¡La Magia existe!
No te das una idea lo increíble que se ven los coloridos entramados de
conciencia que, entre todos estamos ayudando a co-crear.
Prometo traerte hasta este lugar soñado, que encontré, en la ladera de
la montaña.
Quiero que lo sepas, en este preciso instante hay una abeja que se posa
sobre tu nombre.
Reconoce que eres una flor, muy especial, que contiene el dulce néctar
de los corazones que son puros. Hasta que nos volvamos a ver, te abrazo a la
distancia con la luz que te añora desde el centro de mi pecho.
Dejo que estas palabras te lleguen donde quieras que te encuentres, por
obra y gracias de la sin cronicidad.
Continúa brillando con el mismo coraje y la decisión de siempre.
Lo sabes, sin embargo todo tu ser se electriza cuando alguien te lo
recuerda.
Viniste a transformar la realidad.
Texto de Julio Pagano