Los
budistas tiene muchas reglas de vida, y la de buscar para los demás la felicidad
que queremos para nosotros, es similar a las palabras que nos decía el
maestro Jesús, has el bien sin mirar a quien.
Estas
palabras aunque sean de diferentes maestros dan la elevada pauta que en la
medida que pensamos en los demás, también recibimos el beneficio de hacernos el
bien a nosotros mismos.
Vivimos
una etapa de la civilización de un profundo egocentrismo, y por momentos tenemos
la sensación de estar solos en el camino de crecer como personas espirituales,
pero la buena noticia es que no es verdad, lo que está ocurriendo es que ser
seres bondadosos, solidarios y compasivos no tiene tanta publicidad como el
pensar solo en uno mismo.
Hay
muchas personas que practica nuestra más preciada cualidad, y es el Ser Humanos,
en cada acto de humanidad estas dejando tu ejemplo como señal de persona
espiritual, viviendo una vida terrenal.
Reconocer
que nada da tanta felicidad como el hacer feliz a otros es un paso importante
para que seamos mejores.
Victor Roude