Cuando
hablamos de paz lo primero que viene a nuestra mente, es un lugar tranquilo, pajaritos cantando u olas rompiendo en la costa, un ambiente de armonía
y serenidad.
Ese
tipo de Paz es muy placentera, pero la verdadera paz es la que debemos cultivar
en nuestro interior, cuando nuestro ser esta en paz nada de lo externo puede
alterarnos.
Los
conflictos son parte de la vida, y evitarlos no es la manera de resolverlos, ya
que si llegaron a nuestra vida, deberá ser porque hay cosas que debemos
aprender, al enfrentarlos y resolvemos no
solo avanzamos un escalón en nuestro proceso de crecimiento sino que ayudamos a
que nuestra paz interior, y así podamos
disfrutarla.
No
deben preocuparte los conflictos como tu capacidad de resolverlos, cuantos más
resuelvas más simple serán tus pruebas y no porque te lleguen menos, sino porque
tu estarás cada vez mejor preparado para resolverlos.
La
paz interior es la que te dará la paz externa.
Un
viejo refrán africano reza:
“Sin enemigos internos, ningún enemigo externo podrá
hacerte daño”
Victor Roude