Todos los seres humanos buscamos naturalmente satisfacernos,
de emociones, alegría, sexo, comida, amor,
respecto, reconocimiento etc. y así podríamos seguir con la lista.
Pero realmente sabemos de qué manera nos afecta esta búsqueda
de sentirnos plenos en todos los aspectos,
y que ocurre cuando no lo podemos conseguir.
En general el ser
humano busca las soluciones inmediatas a una insatisfacción ya sea de manera consiente
o inconsciente, y ahí está el problema, que cuando no somos conscientes de que nos pasa, recurrimos de manera inconsciente a
paliativos que nos permita compensar la falta de satisfacción en cualquier orden.
No necesariamente la búsqueda de satisfacernos es directa con respecto a la falta, sino que
se manifiesta de diferente manera, la persona que sienten la falta en algún aspecto
de su vida, automáticamente busca la manera de compensarlo en otro aspecto.
Y cuando eso ocurre, en general adoptamos conductas o actitudes también aparecen
las adicciones, todo esto dan una satisfacción solo momentánea, y lo más serio es que generan consecuencia peores que la solución momentánea
que creímos nos brindaba.
Buscar satisfacerse de manera momentánea en cualquier aspecto,
usualmente produce en corto tiempo un sentimiento
de insatisfacción.
Si apostamos a
sentirnos satisfechos y plenos interiormente no buscaremos la satisfacción en
el exterior.
Cuando encontramos la satisfacción interna la externa vendrá
sola, no necesitaremos buscarla.
Y para que eso ocurra, lo que pensamos, lo que decimos y lo
que hacemos deben ser la misma cosa.
La vida, la Fe y tú siempre te darán la oportunidad que
necesitas para cambiar algo.
Si no sabes a dónde vas, es muy posible que nunca sepas
si llegases.