martes, 3 de noviembre de 2015

¿COMO USAS ESA PODEROS HERRAMIENTA QUE ATRAVIESA TODO?



Las palabras tiene poder y energía pero no prestamos mucha atención hasta que su energía afecta nuestra vida.
¿Recuerdas la fábula de la rana? 
“Un grupo de ranas viajaba por el bosque y, de repente, dos de ellas cayeron en un   hoyo profundo Todas las demás ranas se reunieron alrededor del hoyo. Cuando vieron cuán hondo era, dijeron a las dos ranas que estaban en el fondo, que para efectos prácticos, se debían dar por muertas.
Las dos ranas no hicieron caso a los comentarios de sus amigas y siguieron tratando de saltar fuera del hoyo con todas sus fuerzas. Las otras ranas seguían insistiendo que sus esfuerzos serían inútiles. Finalmente, una de las ranas puso atención a lo que las demás decían y se rindió. Se desplomó y murió. La otra rana continuó saltando tan fuerte como le era posible.
La multitud de ranas le gritaba que dejara de sufrir y simplemente se dispusiera a morir. Pero la rana saltaba cada vez con más fuerza hasta que finalmente saltó fuera del hoyo. Cuando salió, las otras ranas le preguntaron:
– ¿No escuchaste lo que te decíamos?
La rana les explicó que era sorda. Ella pensó que las demás la estaban animando a esforzarse más para salir de allí.”
Esta fábula  contiene dos lecciones:
Primero: La palabra tiene poder de vida y muerte. Una palabra de aliento compartida con alguien que se siente desanimado puede ayudar a levantarlo y finalizar el día.
Segundo: Una palabra destructiva dicha a alguien que se encuentra desanimado puede ser que acabe por destruirlo. Cualquiera puede decir palabras que roben a los demás el espíritu que les lleva a seguir en la lucha en medio de tiempos difíciles. Tengamos cuidado con lo que decimos. Pero sobre todo con lo que escuchamos, no siempre hay que prestar atención, utilicemos sólo lo que es bueno.
Suele ocurrir que no comprendemos lo poderosas que son las palabras, podemos hacer mucho bien o mucho mal con solo una palabra dicha en el momento oportuno.
En lo cotidiano también nos ocurre de qué manera unas palabras nos dan energía positiva o negativa , si te ofrecen un alimento y tu compañero te dice , yo lo probé y es asqueroso te da la misma disposición que si dijera a mí no me gusto Los otros días escuche a una persona decir odio la lluvia y la compañera dijo que curioso a mí a veces me molesta,   ¿ves la diferencia?
En cada persona que te habla o escuchas palabras negativas y de pesimismo, estas  frente a alguien que te habla de sus propias limitaciones y miedos, tampoco tienes que ser sordo para inocularte de lo negativo, pero si debes saber cómo protegerte.
Hablemos de vida, de alegría, de esperanza, a todos aquellos que se cruzan en nuestro camino.
Recuerda que tu palabras no solo la escuchan los demás, también, las escuchas tú mismo.  Ese es el poder de las palabras, pensar de qué manera hablamos y a quienes escuchamos es lo que hace la diferencia de como pensamos, si permanentemente estás hablando o escuchando palabras desagradables o negativas es muy factible que termines pensando de esa manera.
No subestimes de qué forma lo que escuchas entra en tu subconsciente y modifica tu actitud, te encontraras hablando o actuando de manera que no te ayudara.
Prueba de hablar solo un día de manera positiva, y veras dos cosas la primera como reacciona las personas y segundo de que manera te sientes al finalizar el día.
Victor Roude